En mérito a la fundación de la Sociedad Boliviana del Charango el 6 de abril de 1973, se promulgó la Ley No. 3451 que declara esta fecha como el Día Internacional del Charango, revalorizando la importancia de este instrumento originario de Potosí, que, entre otros tantos instrumentos, destaca por sus características y es conocido como el “rey de los instrumentos tradicionales del altiplano boliviano”.
La Sociedad Boliviana del Charango se creó con el fin de defender este instrumento y difundirlo como Patrimonio Cultural de Bolivia, así como impulsar su investigación. Los que estuvieron a la cabeza del proyecto fueron: William Centellas, Ernesto Cavour y Abdón Cameo, quienes tuvieron el propósito de agrupar a la familia de charanguistas, intérpretes y constructores del instrumento.
Actualmente, tienen filiales en diferentes departamentos del país y entre sus principales logros se encuentran la realización del XI Congreso y X Encuentro Internacional del Charango, eventos que tienen alcance mundial ya que el instrumento de cuerdas, en forma de guitarra pequeña, complace y deleita no solo a bolivianos.
Por su parte, la Ley No. 3451, promulgada el 21 de julio de 2006, en su artículo 1 señala que “Declárase al “Charango”, Patrimonio Cultural de Bolivia, como instrumento de Origen Nacional, que tiene a Potosí como “Cuna del Charango””. Dicha norma también reconoce al 8 de enero como el “Día Nacional del Charango”.
Potosí es conocido como la “cuna del charango” porque en el portal del Templo de San Lorenzo, el instrumento está tallado en piedra junto con las figuras antropomorfas, las denominadas “sirenas charanguistas”.
Originalmente, la caja de resonancia de este particular instrumento estaba hecha del caparazón del quirquincho, sin embargo, en vista de que la especie se encuentra en peligro de extinción, ahora es confeccionada de madera. Asimismo, las cuerdas están elaboradas a base de nylon o acero.
Son tres las familias de charangos que existen: el Walaychu, caracterizado por un tono agudo y con un tamaño de 50 centímetro; el Charango, de tono bajo y con un tamaño de 60 centímetros y el Roncoco, de tono grave y mide 75 centímetros. Este importante instrumento es parte de los tradicionales carnavalitos, bailecitos, huayños, cuecas y una variedad de géneros que forman parte de la música boliviana.