Sucre, 08 de agosto de 2024 (ABI).- La histórica Casa de la Libertad, donde nació Bolivia hace 199 años, fue el escenario central de los actos legislativos en homenaje al aniversario patrio. El vicepresidente David Choquehuanca instaló la sesión y en su mensaje abogó por la democracia directa, la unidad, el afianzamiento del Estado Plurinacional y la alternancia en el poder.
Estos desafíos están en lo que denominó la segunda fase del proceso de cambio, donde “prevalece la democracia directa y por consenso, donde no hay primeros ni últimos, donde según la lógica circular rotan las autoridades de gestión política y fluye el poder, donde el monopolio a la verdad no existe, donde los mayores son respetados y los niños son protegidos, donde los jóvenes van para desafiar el presente y defender su futuro, donde el honor del pueblo se sustenta sobre el modo en el que se trata”, afirmó.
Vestido con un poncho multicolor y un sombrero de color negro, típico de la región lacustre del Titicaca, de donde es originario, presidió la sesión legislativa que empezó con minutos de retraso y con incidentes protagonizados por legisladores de oposición, lo que lo obligó a cuestionar los hechos y reflexionar sobre la importancia de la tolerancia.
“Pedir respeto a nosotros mismos, a la Casa de la Libertad, respeto a la lucha de los pueblos. La democracia paliativa no ha tenido la capacidad de construir una Bolivia unida, no ha tenido la capacidad de superar los odios, el individualismo y el regionalismo, pongámonos la mano al pecho y de una vez construyamos unidad”, insistió minutos antes de su discurso oficial.
El presidente Luis Arce llegó a la Casa de la Libertad acompañado de niños vestidos con atuendos típicos de diferentes regiones, mostrando la multiculturalidad de Bolivia. De inmediato se dio inicio a la sesión legislativa, donde estuvieron diferentes autoridades de Estado, cuerpo diplomático e invitados especiales.
El mensaje de Choquehuanca estuvo marcado por la reflexión y también el trazado de desafíos, una vez identificados en el Estado colonial "muchos de los problemas que aún persisten en la sociedad boliviana y que están marcados por la división y el odio arrastrados de una sociedad colonial y con privilegios frente a una amplia población marginada.
“En el Estado republicano se ha consolidado una democracia representativa que no representa a nadie y está por encima de la democracia directa y de la democracia comunitaria, vigente sólo para algunos temas locales”, afirmó e insistió en la necesidad de cambiar la sociedad para beneficio del conjunto de bolivianos.
Justamente en esa línea está la segunda fase del proceso de cambio, que es la consecuencia de una primera fase en la que “se ha conseguido fortalecer la inclusión despolarizar las asimetrías socioeconómicas, consolidar la tenencia de la tierra y potenciar las autonomías”, explicó.
No estuvo ausente de su discurso la importancia de apalancar la economía con la industrialización, política que encamina el presidente Arce con la visión de consolidar la Bolivia industrializada hacia el Bicentenario, con más de 170 industrias en diferentes regiones.
“Cuando el pueblo consensúa liberar al Estado plurinacional de las taras que lo asfixian nuestros ancestros guiarán el camino”, afirmó.
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