Según análisis del Observatorio Agroambiental y Productivo (OAP), dependiente del Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras (MDRyT), la fluctuación de precios de la carne de res en los principales mercados del país no sufrió ningún incremento durante los días de conflicto y que el acuerdo suscrito entre el Gobierno y la Confederación Nacional de Trabajadores de Carne de Bolivia (Contracabol) permite comercializar el alimento a precio justo.
Un sondeo realizado por el OAP los días martes y miércoles en las ciudades de La Paz y El Alto establece un precio minorista de carne de res, en corte chuleta, de Bs 28 y Bs 32 el kilo.
En el caso de la ciudad de Cochabamba, el precio del kilo fue de Bs 32. En Santa Cruz, no varió de Bs 30, también en corte chuleta.
En ese mismo período, el precio del kilo de carne fue de Bs 23 en la ciudad de Trinidad.
Consultadas las comercializadoras de carne del mercado Rodríguez de La Paz, afirmaron que el precio de la carne no incrementó en su venta directa a las amas de casa.
“La carne la estamos dando al mismo precio, el pecho a 26 bolivianos el kilo; la pulpa a 40, 44 y 46 bolivianos (…), las estamos dando al mismo precio”, sostuvieron las encuestadas.
En esa línea, el costo de la carne se mantiene a partir de la firma de convenio entre autoridades del Gobierno nacional y directivos de la Contracabol, en la ciudad de Cochabamba, refiere un reporte del MDRyT.
Álvaro Mollinedo, viceministro de Desarrollo Rural y Agropecuario, dio a conocer en entrevista con medios de comunicación, que el acuerdo contempla puntos como la fiscalización inmediata y conjunta a los centros de ganado de remate en pie, además de un estudio de cuantificación del hato ganadero hasta 2022.
Informó también, sobre la conformación de un comité que analice la oferta y demanda, priorizando el abastecimiento del mercado interno a precio justo, dejando el excedente para la exportación.
Reiteró el compromiso del Gobierno nacional de promover la reactivación productiva y económica, garantizando políticas integrales que permitan que pequeños y medianos productores tengan mejores condiciones para la comercialización de su producción.