Santa Cruz, 21 de noviembre de 2025 (ABI).– Las labores de emergencia se intensificaron este viernes en la comunidad de Achira, en Samaipata, donde se cumple el quinto día de trabajo para despejar la quebrada de alto riesgo, acelerar la limpieza y reforzar la protección para las familias afectadas por la mazamorra que devastó la zona.
Equipos especializados, maquinaria pesada, personal militar y brigadas de auxilio continúan movilizados, mientras se instalan domos de atención médica, se refuerza la ayuda humanitaria y se mantiene la búsqueda de las dos personas desaparecidas.
“Mandamos medicamentos y brigadas de donativos, se va a establecer un campamento fijo con unos domos, con las unidades médicas permanentes, para atender la emergencia (…) Dentro de la magnitud de la desgracia, en este momento hay dos desaparecidas”, dijo el secretario de Gestión Institucional de la Gobernación, José Luis Gómez.
Además, el colapso de la carretera principal complicó aún más las labores de auxilio. Para afrontar la emergencia, la Gobernación coordinó con el Ejército el envío de soldados con herramientas, además de disponer más de 30.000 litros de diésel para el funcionamiento de maquinaria pesada.
“Hay un trabajo en conjunto con la Gobernación, el comité cívico y la misma población. Hay precariedad, falta de política, pero todo se está compensando con voluntad”, añadió la autoridad, en entrevista con Bolivia TV.
Los sobrevuelos, el transporte de insumos y el acceso al área afectada se mantienen activos, con el objetivo de acelerar la rehabilitación del camino y permitir la llegada constante de apoyo.
La ayuda humanitaria suministrada por el Gobierno, la Gobernación, el Comité Cívico Pro Santa Cruz y organizaciones civiles supera las 20 toneladas, entre alimentos, agua, medicamentos y material de emergencia.
“Lo importante es que se restablezca la carretera, porque al restablecerse el flujo podremos estructurar una respuesta más integral. La gente no puede vivir de ayuda humanitaria todo el tiempo, necesita recuperar sus actividades”, indicó Gómez.
Se prevé que las médicas brigadas en Achira brinden atención permanente durante dos o tres meses, hasta que concluya la temporada de lluvias.
Daños en 23 comunidades y posible declaratoria de desastre
La crecida de los ríos en Samaipata impactó a 23 comunidades, dejó viviendas afectadas en Achira, muchas catalogadas como inhabitables, y provocó el desplazamiento masivo de familias.
“La mazamorra, lo que nosotros llamamos el efecto del turbión, entró a una comunidad donde había 160 casas, en su mayoría precarias. Son casas humildes y ahora inhabitables. Alrededor de 800 personas fueron desplazadas a lugares seguros, entre ellas niños y adultos mayores”, señaló.
La Gobernación anunció que se encuentra en alerta ante la posibilidad de declarar desastre departamental si las condiciones lo ameritan.
“Si vemos necesario, no vamos a dudar en declarar el desastre para que la parte administrativa del Gobierno se facilite y todo fluya”, agregó la autoridad.
GMM/MEGB