El analista político Hugo Siles dijo que el comportamiento del gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, y su gente en actividad protocolar por la efeméride cruceña fue un acto de intolerancia y racismo flagrante.
“Lamentablemente, lo que han ocasionado el viernes pasado la gente de Luis Fernando Camacho, el propio gobernador Camacho, es un bochorno, es un acto de intolerancia, de racismo flagrante. No hay nombre para disfrazar esto”, manifestó, en una entrevista en el programa “A todas luces” de Bolivia Tv.
El experto explicó que el quitar la wiphala del mástil en el acto público fue un ultraje a un símbolo patrio y una actividad desafiante contra las normas establecidas.
También mencionó que el hecho de negar la palabra al presidente en ejercicio, David Choquehuanca, fue una suerte de revancha y de buscar el aplauso de sectores radicales.
“Es una vergüenza. Si uno mira las imágenes y las observa, y estas imágenes ya dan la vuelta al país y seguramente al mundo, obviamente que va a encontrar que este nivel que exhibe el gobernador Camacho no está a la altura en definitiva de ponerse en la tolerancia, en la actitud democrática y sobre todo hospitalaria”, agregó.
Además, recordó que el hecho de que el presidente del Comité Cívico Pro Santa Cruz, Rómulo Calvo, se pusiera de espaldas para no saludar a las autoridades y asambleístas departamentales del Movimiento Al Socialismo fue una más de sus expresiones de racismo incomprensible.
“No representa a la población que vive, que trabaja, que precisamente está en Santa Cruz recuperándose luego de todas las consecuencias que dejaron los 21 días de paro que protagonizó el ahora gobernador Camacho, antes presidente del Comité Cívico, el golpe de Estado, el gobierno de facto”, sostuvo.
El analista lamentó lo sucedido y dijo que se trata de acciones que “no ayudan a reconfigurar el ambiente pacífico, de cordialidad, que debemos tener en Bolivia”.