El coordinador del comité impulsor del juicio por el golpe de Estado de 2019, Aldo Michel, denunció este viernes que gente vinculada a grupos paramilitares, que se reunieron el pasado sábado en las instalaciones de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB) en La Paz, se infiltraron en el conflicto de la Asociación Departamental de Productores de Coca (Adepcoca) para generar mayor conflicto.
“Estos grupos paramilitares, que han sido alojados escandalosamente en la Asamblea de Derechos Humanos, han participado de lo que ha sucedido ayer en Villa Fátima, con la convulsión que se ha provocado entre algunos cocaleros y personal, gente, funcionarios de la Alcaldía y de estos grupos que han llegado del interior también, que han provocado actos de violencia”, indicó.
Afirmó que estos actos están ligados a la marcha indígena afín a Fernando Camacho y que forman parte de un plan conspirativo contra el Gobierno nacional.
“Este es un escenario político conspirativo, es parte de un plan diseñado por la gente de la oposición y principalmente por gente que quiere eludir la justicia, como el señor Fernando Camacho, secundado por Carlos Mesa y otros”, manifestó.
Dijo que en este escenario político conspirativo, también juegan un rol importante Amparo Carvajal y la hija de Jeanine Áñez, Carolina Ribera.
“La señora (Amparo) Carvajal, con la hija de la señora Jeanine Áñez, han posesionado una acción, un plan para desinformar, para montar mentiras sobre la condición de la señora (Jeanine) Áñez en el penal; pero, además, para iniciar un proceso sedicioso, conspirativo, conectado a esta supuesta marcha de indígenas”, subrayó.
Señaló que con la marcha se pretende instalar el desarrollo de un conflicto, con tres componentes: victimizar a Jeanine Áñez para frenar el juicio; intentar mostrar que hay un conflicto de tierras; y generar un escenario de violencia para conspirar contra el Gobierno nacional.