La Paz, 11 de agosto de 2025 (ABI). - El Viceministerio de Régimen Interior impulsó un curso especializado que busca fortalecer las capacidades de autoridades, instituciones y actores sociales en la lucha contra el crimen organizado internacional, para proteger a la población boliviana ante amenazas que trascienden fronteras.
“Este tipo de capacitaciones son significativas para fortalecer la seguridad y proteger a la ciudadanía frente a amenazas que cruzan fronteras, uniendo esfuerzos y conocimientos en la lucha contra el crimen organizado”, afirmó el viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera.
Durante la inauguración del Curso Especializado de Lucha contra las Organizaciones Criminales, Aguilera resaltó el compromiso del Estado boliviano con la seguridad y la paz social.
“Estamos comprometidos con nuestra población y la seguridad que pueda ser vulnerada, por ello queremos brindar información y herramientas que coadyuven en nuestro trabajo diario”, afirmó y subrayó que la prevención social y comunitaria será la primera línea de defensa para reducir factores de riesgo vinculados a una cadena delictiva.
Aguilera explicó que el curso abordará diversas perspectivas, desde el combate operativo, inteligencia y lucha financiera hasta la cooperación nacional e internacional, fundamentales para enfrentar la criminalidad organizada.
“Es momento de forjar políticas y estrategias con identidad nacional, aprovechando la experiencia de nuestro talento humano, para diseñar una persecución efectiva y multilateral contra la criminalidad”, aseveró.
En ese contexto, destacó la importancia de la lucha contra el financiamiento del crimen organizado, pues “atacar las ganancias ilegales es tan crucial como capturar a los líderes, cortar el flujo económico disminuye drásticamente la capacidad operativa de estas redes criminales”.
Entre las medidas urgentes que propuso está la “colaboración obligatoria de bancos y empresas”, el acceso irrestricto a la información tributaria, y la intervención en mercados ilegales vinculados a drogas, minerales, armas y delitos conexos.
“Cuando capturamos a las cabezas de estas organizaciones criminales, hemos comprendido que estas cabezas cambian, juntan. (…) Cuando cortamos el flujo económico, la capacidad operativa de redes criminales disminuye drásticamente. Esto exige medidas operativas urgentes. La primera, colaboración obligatoria de bancos y de empresas”, enfatizó Aguilera.
Reiteró que la lucha contra el crimen organizado debe ser coordinada y sostenida para evitar que “cortemos ramas sin eliminar raíces”, y resaltó la vinculación entre estas organizaciones y las amenazas a la seguridad interior del país.
Este curso contará con la participación de expertos nacionales e internacionales, con el fin de establecer lineamientos estratégicos que potencien la acción conjunta y eficaz de las instituciones encargadas de combatir el delito organizado.
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