Nueva York, Estados Unidos, 25 de septiembre de 2025 (ABI).-– El presidente de Bolivia, Luis Arce, reiteró la firme posición de su Gobierno frente a las acciones de Israel en la Franja de Gaza, calificando los hechos como un "genocidio" y destacando la necesidad de mantener una política exterior coherente con los principios de los derechos humanos, incluso ante posibles cambios de administración en el país.
“Un genocidio no se puede ocultar por donde uno lo mire. Ese fenómeno se está produciendo, y ha sido muy condenado por muchos países”, afirmó Arce durante una entrevista concedida al medio internacional RT (Russia Today).
El mandatario recordó que Bolivia fue uno de los primeros países en romper relaciones diplomáticas con Israel tras el recrudecimiento del conflicto en Gaza, como una señal clara de condena frente a lo que consideró como crímenes de guerra contra la población palestina.
“Nosotros hemos sido muy claros en romper relaciones con Israel, producto del genocidio que se estaba produciendo. Bolivia no va a permitir ese tipo de situaciones”, enfatizó.
El presidente boliviano expresó su deseo de que esta posición se mantenga más allá de su gestión, reafirmando que se trata de una política de Estado basada en la defensa de los derechos humanos y la autodeterminación de los pueblos.
“Esperamos que la postura de Bolivia sobre el enclave palestino siga siendo la misma incluso con el cambio de Gobierno”, dijo Arce, marcando distancia con cualquier posibilidad de retroceso diplomático.
Ruptura de relaciones
La decisión de Bolivia de cortar relaciones diplomáticas con Israel fue anunciada oficialmente en octubre de 2023, en medio de una ofensiva militar israelí sobre Gaza que causó miles de víctimas civiles, incluidas mujeres y niños, y que fue duramente criticada por organismos internacionales y diversos gobiernos del Sur Global.
Bolivia se sumó así a otros países que han denunciado públicamente las acciones del Estado israelí, demandando el fin de los bombardeos, el respeto al derecho internacional humanitario y el reconocimiento del Estado palestino.
La política exterior boliviana ha mantenido, precisó el mandatario, una línea de solidaridad con el pueblo palestino desde el retorno de la democracia, en consonancia con una visión multipolar y de defensa de los pueblos históricamente oprimidos.
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