Hemos ingresado casi de manera continua a las elecciones nacionales en otro periodo electoral, esta vez para elegir autoridades subnacionales: gobernaciones y alcaldías.
Esta continuidad del escenario electoral se puede percibir no sólo en los tiempos sino en los discursos de los diferentes frentes políticos, en términos generales continúa en la polarización antagónica que corresponde a la retórica MAS anti-MAS, ya que este continúa siendo la primera fuerza política con estructura a nivel nacional y por esto mismo se ha visto envuelto en pugnas internas debido a su composición amplia y diversa. Las demás fuerzas políticas en su mayoría agrupaciones y alianzas apelan más a su influencia territorial en el sector que consideren que puedan generar más adeptos y a su vez continúan con su discurso como objetivo prolongado de las elecciones generales. Sin embargo, en el ámbito territorial es muy necesario hablar de gestión específica ya que es el espacio donde se pueden resolver problemas concretos de la población, en este sentido continuar con una lógica retórica sin mayor propuesta como ha hecho la oposición al MAS hasta ahora, sólo contribuye a la continua polarización, pero no así al fortalecimiento de las autonomías y de la gestión subnacional.
- Pugnas, protagonismos desesperados y bajas.
La presentación de los candidatos por diferentes frentes para las elecciones subnacionales develó las pugnas internas y los protagonismos desesperados de algunos y algunas candidatos y candidatas.
El MAS ha mostrado la pluralidad de la que está compuesto y que existe una pugna interna de visiones y de grupos, lo que desde la oposición y algunos medios se ha reflejado como una ruptura por crisis interna, sin embargo quien conoce las lógicas de organización interna del MAS comprende que hay muchos entramados y visiones diversas que no encajan en lo que se quiere posicionar como una ruptura sino más bien corresponden a pugnas de liderazgo por parte de las diferentes organizaciones y personalidades. En este sentido se han visto pugnas internas por candidaturas como la de la gobernación de Santa Cruz, Cochabamba, etc. Que han concluido en resoluciones y desacuerdos dentro del mismo instrumento político.
Lo que sí corresponde a una ruptura como tal es la candidatura de Eva Copa a la alcaldía de El Alto por otro frente político distinto al MAS, tras la aceptación a la invitación de la alianza política Jallalla. Lo que para algunos -en su mayoría críticos de la última gestión del MAS- corresponde a un acto de “valentía”, para otros en su mayoría militantes del MAS corresponde a una traición, por parte de alguien que buscaba un cargo y al no ser dado cambia su color político, Copa decidió apostar por su carrera personal política por fuera del MAS. Lo que de principio se constituye en un error político-militante al abandonar su partido por una candidatura, pero que se podría convertir en un acierto en su carrera política personal por fuera del MAS; seguramente su decisión corresponde a este cálculo político en el afán de conseguir el cargo y protagonismo político que persigue en el ámbito municipal en esta ocasión.
Finalmente, algo que estaba previsto en la "estrategia" de oposición al MAS, es la renuncia de candidatos ante la imposibilidad de generar una oposición bajo un solo frente, optaron por presentar diferentes personas para luego dar de baja las candidaturas que no tengan opción de hacer frente al MAS, misma estrategia utilizada en las elecciones generales del pasado año.
Por lo que corresponde a la oposición al MAS se han conformado diversos frentes políticos, mostrando al igual que en las elecciones generales que no existe un proyecto conjunto ni unidad en la posición, se han rescatado algunos personajes del régimen de Añez, como Iván Arias, Waldo Albarracín, y la misma Jeanine, sin embargo, no se presentan perfiles fuertes de renovación política. Por otro lado, las rupturas en la oposición por parte de Sol.bo con la alianza con Carlos Mesa se dieron a último momento antes de presentar las listas mostrando la disputa por protagonismos y desacuerdo existente entre estas fuerzas políticas.
El lamentable deceso de Felipe Quispe “El Mallku” candidato a gobernador de El Alto por la agrupación Jallalla, al ser el primer candidato en cuanto a la intención de voto según encuestas de Ciesmori publicadas en Unitel, generó una reconfiguración en la interna de su agrupación política y en el escenario político nacional, dando quizá posibilidades a otros frentes de captar esos votos. Actualmente Santos Quispe, el hijo de “El Mallku” fue proclamado como el sucesor de la candidatura, lo que puede resultar en un voto póstumo por el líder fallecido.
- Retos de gestión territorial.
La gestión municipal y departamental es muy importante, ya que es en el territorio que se puede resolver, abordar y tener mayor acercamiento con las problemáticas cotidianas de la población, problemas que nos aquejan a diario como el transporte, la seguridad, la salud, gestión de apoyo a los emprendimientos, gestión turística, etc.
Los Gobiernos Departamentales tienen que atender las 36 competencias exclusivas asignadas por la Constitución Política del Estado (construcción de puentes y caminos, riego, electricidad, producción agropecuaria, industrial, medio ambiente, desastres, salud, educación técnica, , seguridad ciudadana, gestión y promoción del turismo, etc.) y otras nuevas asignadas por el Nivel Central del Estado. Los Gobiernos Municipales tienen 43 competencias exclusivas (aseo urbano, manejo y tratamiento de residuos sólidos, proyectos de infraestructura productiva, políticas de turismo local, transporte urbano, promoción y conservación de cultura, patrimonio cultural, histórico, proyectos de fuentes alternativas y renovables de energía, planes de ordenamiento territorial y de uso de suelos, catastro urbano, etc.)
Además de las competencias concurrentes que son aquellas en las que la legislación corresponde al nivel central del Estado y los otros niveles ejercen simultáneamente las facultades reglamentaria y ejecutiva. Y las competencias Compartidas, aquellas sujetas a una legislación básica de la Asamblea Legislativa Plurinacional cuya legislación de desarrollo corresponde a las entidades territoriales autónomas, de acuerdo con su característica y naturaleza.
Lo que implica que tanto los gobiernos municipales como los departamentales para desarrollar su gestión de manera eficiente deberían generar este tipo de gestiones territoriales y coordinar las que correspondan con el gobierno central. Actualmente el modelo Estatal continúa fuertemente asentado en el gobierno central, por dos factores principales: las personas que ejercen los gobiernos municipales y gobernaciones muchas veces desconocen sus competencias y esperan del nivel central del Estado para recibir cosas sin gestionarlas, esto se debe a que la aplicación de las autonomías es reciente pese a que se viene generando gestión territorial desde la ley de descentralización que ya transfirió y delegó anteriormente atribuciones de carácter técnico-administrativo a las Prefecturas.
- Transporte, Bolivia debe ser de las pocas ciudades del mudo y de Latinoamérica que continúa con un transporte público tan precario. Sin duda es uno de los aspectos más importantes para cambiar la calidad de vida de la gente de manera tangible y puntual.
Coordinar entre el sector tan complicado de los transportistas para generar un transporte público digno y de calidad. Y generar opciones de transporte público moderno como son los buses y teleféricos. En el contexto de la pandemia es una necesidad que se ha notado mucho más.
- Salud, la gestión en salud es un tema que ha sido históricamente deficiente en el país, sin embargo en el contexto de pandemia actual también nos hemos hecho mucho más conscientes como ciudadanos de la urgencia de poder contar con hospitales y centros de salud, adecuados, equipados, y accesibles.
Las gobernaciones y municipios tienen competencias compartidas y concurrentes en este sentido con el gobierno central que deben gestionar de manera eficiente en cuanto les compete.
- Tratamiento de residuos sólidos, es un problema que se ha visto latente en ciudades cómo La Paz en la gestión de Revilla, así como en El Alto y en otros municipios. Necesitamos profesionalizar la gestión de residuos sólidos y transparentar las gestiones para que no ocurra lo que sucedió con Alpacoma y las concesiones en las que se vieron envueltos Revilla, E. Saavedra, y otros funcionarios ediles.
- Desarrollo económico local, existen en la actualidad muchos emprendimientos locales que necesitan el apoyo y la gestión de los gobiernos subnacionales en distintas áreas para ayudar a hacer estos proyectos más prósperos, visibles y con proyección de largo plazo.
- Áreas metropolitanas, la gestión de áreas metropolitanas facilita la coordinación entre gobiernos y la ejecución de proyectos conjuntos y recursos. Es necesaria la implementación de espacios metropolitanos para la gestión de residuos sólidos, gestión de agua y alcantarillado, gestión turística, productiva, etc.
- Turismo, Bolivia es un país característicamente biodiverso, con muchas tradiciones, gastronomía, cultura y características particulares para el Turismo, sin embargo no existe una gestión municipal ni de las gobernaciones fuerte para desarrollar este sector que es tan importante ya que genera desarrollo local y sostenibilidad a largo plazo de aquellos lugares y rutas turísticas.
Eso solo por dejar algunos puntos en los que los gobiernos locales deberían enfocar su gestión para resolver problemas cotidianos y que no han sido gestionados de manera eficiente en este tiempo.
El voto en las elecciones subnacionales no parece estar tan ligado ya a los frentes políticos como en las elecciones generales, y por esto los y las candidatas deben enfocarse verdaderamente en la capacidad de gestión, de la misma manera que nosotros y nosotras como ciudadanas debemos identificar las problemáticas reales y la capacidad de los frentes políticos de hacer gestión de manera coordinada con los diferentes sectores de la sociedad, empresarios, emprendedores, gremios, y el nivel central de gobierno.
En este sentido se debe superar el discurso del antagonismo político ya que no genera una propuesta concreta de gestión que es lo que se necesita en los gobiernos subnacionales, pues las problemáticas diarias de la población no se resuelven con discursos sino con gestiones concretas.